Bollos suizos

Uno de los dulces recuerdos de mi infancia son las meriendas de bollos suizos con unas cuantas piezas de chocolate. Así que un día llevé a mis hijos a una pastelería de toda la vida y les compré unos bollos suizos para merendar. Cuando me dijeron ¿qué es mami? Me di cuenta estaba desapareciendo de las panaderías, de los sitios donde normalmente compramos, así que decidí empezar a hacerlos y, que al menos en mi casa, los niños sigan teniendo el recuerdo del delicioso sabor de un buen bollo para desayunar, merendar… Si os animáis… aquí tenéis una receta con la que podéis hacerlos.

Ingredientes

Masa Madre (90gr de harina de fuerza, 50gr de leche y 2g de levadura fresca)
120gr de leche
340gr de Harina de fuerza
2 huevos
80gr de azucar
15 gramos de levadura seca
5gr de sal
60gr de mantequilla
Decoración: Azúcar

Paso a paso

El día anterior

Prepara la masa Madre disolviendo la levadura en la leche e incorporando la harina y déjala en la nevera en un bote hermético hasta al día siguiente.

Al medio día

Sacar la masa Madre de la nevera y dejar templar a temperatura ambiente. La masa habrá aumentado.

Mezclar todos los ingredientes menos la mantequilla.
Dejar reposar 10 minutos.
Amasar 5 minutos plegando la masa sobre si misma, incorporar la mantequilla blanda en dados y mezclar hasta que la mantequilla esté completamente incorporada en la masa.
Dejar reposar unos 5 minutos.
Amasar unos 10 minutos hasta que quede lisa y brillante.
Dejar fermentar en un bol tapado con un trapo hasta que doble el volumen (unas 4-5 horas aproximadamente según la temperatura de la habitación, cuanto más caliente este la habitación antes subirá).

Por la tarde

Pasar a una mesa y apretar contundentemente para que se escape el gas (oirás como sale).

Hacer una bola y dejarla tapada unos 15′ antes de formar los bollos.

Dividir la masa en partes iguales para hacer los bollitos.

Deja los bollos sobre el papel de hornear cubiertos con un paño durante una hora y media / dos horas hasta que hayan doblado de nuevo su volumen.
Cuando hayan doblado de volumen pinta con yema.

Déjalos unos 10 minutos (mientras enciende el horno a unos 220 grados) y vuelve a pintarlos. Hazles un corte profundo con un cuchillo bien afilado y rellena el corte con azúcar húmedo.